Un diseño más robusto y elegante
A simple vista, el nuevo Škoda Kodiaq luce un aspecto más robusto y elegante. El frontal ha sido rediseñado con una parrilla más prominente y unos faros LED Matrix más afilados que le otorgan una mirada más tecnológica. En la zaga, los pilotos traseros también se han actualizado con tecnología LED y un diseño más estilizado.
Las líneas laterales del vehículo se mantienen fluidas y dinámicas, pero ahora se ven reforzadas por unos pasos de rueda más marcados y unas llantas de aleación de nuevo diseño que pueden ser de hasta 20 pulgadas.
Un interior aún más espacioso y confortable
Si por algo destacaba el Kodiaq era por su amplio interior, y en esta nueva versión la habitabilidad se ha visto aún más ampliada. El SUV checo ofrece ahora más espacio para los pasajeros en las dos filas de asientos, especialmente en las plazas traseras, donde los ocupantes disfrutarán de mayor espacio para las piernas y la cabeza. Además, el maletero sigue siendo uno de los más amplios de su segmento, con una capacidad de 720 litros en la versión de cinco plazas y hasta 2.065 litros con los asientos de la tercera fila abatidos.
En cuanto a la calidad del interior, el nuevo Škoda Kodiaq ha dado un salto importante. Los materiales utilizados son de mayor calidad y tacto, con predominio de plásticos blandos y cuero en las zonas más nobles. El diseño del salpicadero es completamente nuevo, con líneas horizontales que transmiten una mayor sensación de amplitud y una pantalla táctil central de hasta 10 pulgadas que preside la consola central. La instrumentación también se ha digitalizado, con un cuadro de instrumentos virtual de 12,5 pulgadas que ofrece una gran cantidad de información de forma clara y atractiva.